Otras exposiciones
Olympiakoi Agones Timbrophily timbres postales en los juegos olímpicos de atenas 1896 a londres 2012
Beisbol + filatelia
Colección del Museo de la Filatelia de Oaxaca*
El beisbol en México encuentra sus orígenes en los años veinte, desde entonces, fue consolidándose como uno de los deportes de mayor tradición y pasión en nuestro país, y desde luego en Oaxaca, donde existe un extraordinario registro de su historia en todo el mundo, a través de la filatelia.
Beisbol + Filatelia es la colección temática más grande del Museo de Filatelia de Oaxaca [MUFI], misma que nació hace 15 años, con el MUFI, y fue creciendo gracias a las donaciones de Alfredo Harp Helú, amante de este deporte y de la filatelia; de Spook Jacobs, beisbolista y filatelista; y de Peter O’Malley, apasionado del beisbol y entrañable amigo del MUFI.
Más de 5 mil piezas filatélicas se reúnen en esta colección: timbres, bloques, enteros postales, se-tenant, hojas recuerdo, planillas, sobres, piezas especiales, cenicientas, specimen, entre muchas más en diferentes presentaciones y variaciones.
A través de un recorrido geográfico, nos lleva por los países con mayor tradición beisbolera. Desde Estados Unidos, considerado el “padre” del beisbol, con su gran esplendor y elegancia en el diseño de piezas que presumen sus grandes jugadores, auténticas leyendas del beisbol, sus estadios e hitos nacionales; hasta Venezuela, pasando por Panamá, República Dominicana, México y Cuba que cuenta con amplia tradición e historia beisbolera.
México deleita a filatelistas y beisboleros con diseños de artistas como Francisco Toledo, Eduardo del Río “Rius”, Abel Quezada o Gilberto Aceves, quienes han hecho del diamante y su deporte, un espacio único a través de emisiones postales que enriquecen ambas pasiones: la filatelia y el beisbol.
De América hasta Asia, el beisbol y la filatelia se funden para tocar base en la historia de países como China, Japón y Filipinas, que con largas emisiones postales destacan importantes acontecimientos históricos ilustrados con orden y limpieza impresos con fina factura, como puede apreciarse en la estampilla postal beisbolera más antigua de nuestra colección, emitida por Filipinas en 1934.